Hace pocos días nos dejaba Fermín, buen navegante y mejor persona.
Navegó desde muy joven, vinculado siempre al Marítimo de Santander y al mundo de la vela y fue maestro de muchos de los que navegan ahora. Organizó un «sail camp» hace muchos años en El Puntal para enseñar a los por entonces jóvenes y fomentar la afición por la vela, de donde salieron numerosos regatistas. A pesar de haber participado él mismo en bastantes regatas, lo que realmente le gustaba e intentaba transmitir era su faceta de crucerista. Ahora seguramente estará navegando por el otro Azul.
Desde aquí nuestro recuerdo y nuestro respeto, así como nuestro ánimo para su familia.
Driza 
Muchas gracias por estas palabras que con tanto cariño has dedicado a mi padre, en nombre de todos decirte que nos gustaria saber quien eres
Hola Jonás, es lo menos que podemos hacer todos los que apreciábamos a tu padre. Te responderé por email a lo que me preguntas lo antes posible, ahora mismo no puedo. Un afectuoso saludo.
muchas gracias,la verdad es que a uno se le caen las lagrimas de los ojos al ver con que cariño se le recuerda y la huella que ha dejado en tanta gente,a mi como hijo me da mucho ánimo dentro de la pena que uno lleva dentro que se le recuerde con el mismo cariño que tendra siempre en nuestra memoria.
Como te dije, te mandé un correo a la dirección de hotmail. Espero que te haya llegado.
No solo no me ha llegado sino que me ha emocionado no solo a mi sino a toda mi familia las palabras que con tanto cariño le volvias a dedicar.Muchas gracias de nuevo
No hay por qué darlas. Se ganó el afecto y el respeto de muchísima gente. Por algo será, ¿no? Un abrazo.